El padre de Marco Polo de nombre Nicolás hizo el primer viaje de Venecia a la China (Catay) regresando cargado de pieles, esencias, especias, etc. para retornar veinte años después en su segundo viaje con su hijo quien gozó de la confianza del Emperador Kublainkan. Así pudiéramos decir que Simón Bolívar, sin proponérselo fue el gran turista de la libertad. Históricamente hablando, el turismo constituyó un privilegio de las clases adineradas, es decir, de la clase social constituida por los grupos o estratos de gran poder económico. Muchas de estas personas practicaban los viajes como turismo, además del placer que de ello derivaba, como un acto expreso de sobresalir notoriamente como persona importante. Hoy en día el turismo es una de las principales actividades del país, solo que con mala administración y mantenimiento de los recursos naturales, subestimando y muchas veces menos preciando nuestros recursos, sin saber que contamos con paisajes y climas increíblemente diversos, así el turista que nos visita cuenta con distintas opciones, lo que es un punto a favor para los regentes de Mérida, es por esta razón que nos prefieren, en Venezuela existen una diversidad de paisajes, como en el oriente del país las playas, en el centro ciudades metrópolis (Puerto Ordaz, Caracas, Barquisimeto), el Llano (Apure, Guárico, Barinas), los Médanos en Coro y Montañas (Mérida y Tachira) de allí el gran atractivo que ofrece el país a nuestros visitantes si nos ubicamos específicamente en Mérida donde se ofrece un resumen de sus bellezas a lo largo del estado con la exención de las esplendidas nevadas y nuestro particular teleférico, que su ausencia ha marcado una significativa merma en el turismo extranjero que representa las mayores entradas económicas al estado, sin embargo no debemos dejar de lado la creatividad y el talento de sus pobladores para sacarle provecho al sin fin de bellezas naturales aunado a la modernidad en el turismo donde se brindan las siguientes alternativas en espacio rural donde se destacan el Agroturismo, turismo de estancias, Ecoturismo, Turismo de Aventura y el Turismo Deportivo, en el caso de Mérida la ventaja es que nuestros paisajes cautivadores nunca dejan de tener admiradores, y tenemos todos los escenarios para la realización de cada uno de ellos, pero aun así esta actividad económica ha decaído causando resultados nefastos a artesanos y dueños de hospederías y posadas quienes en muchos casos han tenido que acudir al alquiler permanente o simplemente el cierre de las mismas.
El Agroturismo “tiene por finalidad poner en contacto al turista con el proceso de producción del establecimiento agropecuario y el consumo de productos finales del origen doméstico o casero… Suele ser practicado en chacras o granjas temáticas”, El Agroturismo tiene sus orígenes en Misiones en el Municipio de A. Brown (Andresito), Departamento de General Belgrano, en el año 1996 con el apoyo de la Secretaría de Turismo de la Nación. Así en el año 1998 surge el grupo “Agroturismo en Oberá” y al año en Capioví (1999) bajo la denominación de “Grupo Tierra Roja”. Ambos grupos estaban apoyados por el INTA (Delegación Oberá). El primer grupo, compuesto inicialmente de 15 productores y bajo la denominación de “Grupo Los Inmigrantes”, presentaba dificultades internas entre los dos subgrupos que lo componía: los agro campings y las chacras, ambos con intereses y necesidades diferentes. Finalmente, en el año 1999, los agro campings se separan del grupo, cambiando los restantes la denominación a Grupo Agroturismo Oberá.
El Grupo Tierra Roja, compuesto inicialmente por 12 productores, logra al poco tiempo, buenos resultados con apoyo de la Municipalidad local.
El agroturismo en Venezuela está dando sus primeros pasos y específicamente en Mérida es un tema nuevo, aun no se ha entendido de que se trata el tema de los agroturismos teniéndose todos los elementos para trabajar en base a ello, donde solo necesitamos sacar provecho de lo que ya tenemos. El éxito de ello no es sino implementar planes y destinar recursos para que este tipo de actividades resulten, además de beneficiar a la colectividad, también infundir en los visitantes que disfrutan de esta actividad mayor conciencia, viviendo en carne propia como se trabaja en el campo que aunque para ellos es una experiencia nueva, en la rutina del trabajador es un trabajo subestimado.
“Saber que se sabe lo que se sabe y que no se sabe lo que no se sabe; he aquí el verdadero saber”.
Filósofo chino.